Las actividades lentamente se están habilitando en la provincia de Entre Ríos y en las ciudades, y con el mantenimiento y extensión de la cuarentena dispuesta por el gobierno nacional, la población comienza a dar signos de agotamiento del aislamiento social. Pese a la flexibilización de las limitaciones, se mantienen las exigencias y sanciones a quien violan la actual normativa.

Tal vez algunos por confusión, otros por probar suerte y otros desprevenidos o desaprensivos, entre el sábado y el domingo se produjo un inusual movimiento en los parques y lugares de distracción de la capital entrerriana.

Esto obligó a la Policía a ampliar los operativos y disponer fuertes controles que terminaron con la ejecución de actas por infracciones a las cuarentena.

Se informó a UNO que por el descontrol visto, se debieron ampliar los retenes, incluso colocar más uniformados en distintos lugares del Parque Urquiza, Rosedal, Costanera, Thompson, Parque Nuevo, Plaza Mujeres Entrerrianas y Bajada Grande.

Desde la Policía se aseguró que "la gente andaba como loca, caminando con sus perros, haciendo gimnasia, corriendo, caminando, tomando mate, o circulando en vehículos con varias personas".

"Se ve que no les preocupó el mantenimiento de la cuarentena, ya que lo único que se había flexibilizado eran algunas actividades comerciales. Pero en lo vinculado con actividades recreativas, no hay ningún levantamiento de las restricciones", explicó el uniformado.

Por otra parte, el jefe departamental de Policía de Paraná, Raúl Menescardi explicó a UNO que "tenemos 100 actas labradas por violación de la cuarentena en la ciudad, y frente a lo que fue la mayor afluencia de la gente, es que se dispusieron más operativos en las zonas de concentración".

Ahora las actas serán elevadas a la Justicia Federal, donde se tramitarán las causas judiciales donde hay una tramitación por violar la cuarentena.