El primer duelo entre dos equipos campeones del mundo y con una amplia historia en competencias continentales terminó 0-0. En el José Amalfitani, Vélez y Peñarol empataron el duelo de ida de la segunda fase de la Copa Sudamericana. El 4 de noviembre, en Montevideo, disputarán la revancha.

El Fortín buscó tomar las riendas del partido desde el inicio, asumiendo la iniciativa y con agresividad, más allá de los cambios de nombres y de composición del mediocampo. sin embargo, se topó con un conjunto uruguayo de transiciones rápidas, peligroso, más allá de haber perdido a su joya, Facundo Pellistri.

Así, los dos equipos tuvieron oportunidades para abrir el marcador, en una primera etapa de buen ritmo. Terans contó con dos para la visita (una pegó en el palo) y en el inicio, con sendos remates de Galdames y Bouzat, el local amagó con romper el cero.

En la segunda etapa, las acciones se hicieron más disputadas. Con oficio, los Carboneros hicieron sentir incómodos a los dueños de casa, que sintieron la falta de competencia, sobre todo en la precisión. Así y todo, con el manejo de Gago y el ingreso de Centurión y de los chicos de la cantera inagotable de Liniers, sobre el final, Vélez pudo haberse marchado en ventaja, pero apareció el guardameta charrúa.

Vélez volvió a jugar de manera oficial luego de siete meses y mostró un renovado equipo si se tiene en cuenta el que eliminó al Aucas de Ecuador en la fase previa. Tras la salida de Gabriel Heinze, la dirigencia apostó por la contratación del entrenador Mauricio Pellegrino. En lo que respecta al plantel, se fueron Lucas Robertone (Almería), Álvaro Barreal (Cincinnati), Braian Cufré (Mallorca) y finalizó el préstamo de Maximiliano Romero. En contrapartida, los dirigentes adquirieron la ficha de Ricardo Centurión y llegaron Cristian Tarragona, Federico Mancuello y Juan Martín Lucero.

Los uruguayos, por su parte, llegaron a esta instancia luego de quedar eliminados de la Copa Libertadores (finalizó tercero en el Grupo C, por detrás de Jorge Wilstermann y Atlético Paranaense). En sus siete participaciones previas en esta competencia nunca lograron avanzar más allá de los octavos de final.

El ganador de esta llave chocará en la siguiente instancia ante el vencedor del cruce entre Millonarios y Deportivo Cali.