Bordeira nombró a otros dirigentes de Cambiemos en la causa Narcomunicipio y se quebró: "Siento mucha impotencia"

La exfuncionaria municipal Griselda Bordeira brindó este martes una extensa declaración en el marco de las causas Narcoavioneta y Narcomunicipio, donde rechazó las imputaciones en su contra, admitió un acuerdo político de Cambiemos con Daniel Celis en la campaña de 2015 y reconoció un encuentro con Luciana Lemos, a quien le dio la suma de 10 mil pesos.
"No tengo absolutamente nada que ver con los hechos delictivos que se me imputan", comenzó Bordeira. En su relato la imputada circunscribió su relación con Celis, a quien resaltó como dirigente social, a una cuestión meramente política.
Además, la exfuncionaria dio su versión sobre el motivo de algunas conversaciones y chats que forman parte de las pruebas que la incriminan, como aquella dónde se refiere a la participación de Celis en el robo en Las Cuevas o sus críticas al concejal Pablo Hernández y al intendente Sergio Varisco por presuntamente "haber metido la droga en la municipalidad".
Según Bordeira, hay que analizar "en qué contexto" fueron dichas esas apreciaciones, que se explicarían por la "humillación y la vergüenza" que ha "tenido que pasar" y la "exposición pública" que le habían generado las denuncias periodísticas al respecto.
En ese marco, aseguró que sólo algunos dirigentes le daban respuestas a Celis y su entorno, pero que fueron muchos quienes compartieron caminatas durante la campaña y le hicieron promesas. Allí hablo de "funcionarios nacionales"y nombró en el ámbito local a la viceintendenta Josefina Etienoty al concejal Emanuel Gainza,quien en su momento estuvo imputado pero que fue sobreseído.
En ese marco, la exfuncionaria municipal se quebró y entre lágrimas soltó: "Yo me vengo a hacer cargo de lo que me corresponde, pero siento mucha impotencia".
Más adelante, Bordeira dijo que "en ese momento el acuerdo era con Cambiemos" y volvió a reiterar que otros dirigentes le hicieron promesas a Celis pero que luego dejaron de contestarle el teléfono.
Según relató, ella se sumó a la campaña en septiembre de 2015 y ya estaba en marcha el entendimiento con el Movimiento Vecinalista del Oeste que comanda Celis. Reconoció que hubo promesas incumplidas, que generaron malestar en el imputado y que fueron la fuente de los reclamos, pero le atribuyó muchas de esas promesas al sector de Cambiemos con vínculos en el gobierno nacional. Sin embargo, resaltó en varias oportunidades que en ese entonces Celis no tenía ninguna causa y que sólo habían rumores y denuncias periodísticas.
Por otro lado, Bordeira refirió un diálogo en la Unidad Penal N° 6 con Lemos donde ella le habría dicho que iba a contar "toda la verdad" y eso la desvincularía, lo cual no sucedió. En esa línea, dio a entender que ella se encontraba presionada por Celis, que había mentido y más adelante precisó que el reclamo a los dirigentes municipales era de un millón de pesos.
Cuando se la consultó por qué su nombre aparecía en el cuaderno donde figuraban presuntas operaciones de venta de cocaína, Bordeira contestó: "Lemos lo pudo hacer por enojo, no tengo otra explicación".
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