En un mismo proyecto, Grupo Motta aplicó 4 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible
Pionera en la experiencia a gran escala a nivel provincial, la reconocida empresa forestó 33 hectáreas, que recibirán como caudal de riego los efluentes de la producción avícola. El proyecto plasmado es ambicioso en sus objetivos, al punto que responde a los nuevos lineamientos formulados por la ONU. Al respecto, la responsable de Comunicación del Grupo Motta, Lic. Andrea Faisal, manifestó a FM Estación Plus Crespo: “Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son 17 a nivel mundial, instando a generar acciones y políticas tendientes a la paz, la prosperidad, la lucha contra la pobreza y el cuidado del planeta. La empresa en cada uno de los proyectos que desarrolla trata de mantener un equilibrio entre lo económico, lo social y ambiental. Justamente en este proyecto que se está inaugurando, se impacta positivamente en 4 de los objetivos: el 10, 11, 13 y 15. El primero tiene que ver con ciudades sostenibles -sin detenerme en las acciones que Grupo Motta ha hecho en forma directa sobre Racedo-, las mismas apuntan a la sustentabilidad como comunidad. El objetivo 11 tiene que ver con el cuidado de los recursos naturales y de la energía. En este caso la reutilización del agua -que incluso se incrementará con la apertura de la Planta Calisa II. Los ODS 13 y 15, que están vinculados específicamente al cambio climático y el impacto que puede producir una empresa con una inversión de este tipo, pudiendo morigerar el impacto ambiental originado en sus procesos de funcionamiento”.
El recurso humano de la firma comparte con la dirigencia esas premisas, sobre lo cual Faisal comentó: “El propio Augusto Motta destacaba durante la inauguración que se trabaja con profesionales dentro de los equipos humanos de la empresa. Ello hace que se conozca lo que se está haciendo. Los proyectos tienen el respaldo técnico y profesional. Asimismo, esto tiene un fin educativo, aspecto con el que la empresa tiende a ser punta; no por una cuestión de marketing, sino por una conducta empresarial que permite un derrame en la educación. Hay una convivencia directa de las escuelas, las instituciones de la localidad y la empresa. Se sostiene una visión donde lo económico, lo social y lo ambiental, mantienen un equilibrio, para volcarse en beneficios hacia la comunidad de Racedo”, afirmó.