Se compraba bienes con los ahorros que sustraía a un enfermo de su entorno familiar
Un matrimonio de adultos mayores, radicados en Nogoyá, fueron víctimas de una importante sustracción. Si bien el dinero es uno de los bienes más difíciles de recuperar, el trabajo llevado adelante por la División Investigaciones de esa Departamental, arribó al hallazgo de buena parte de los ahorros faltantes e incluso a las inversiones que se habrían efectuado en uso de ese botín. Lo sorpresivo para los damnificados, es que las imputaciones recaen en el entorno familiar.
La Fiscalía de Nogoyá concentra no sólo identificación de autoría, sino probanzas materiales. Supo FM Estación Plus Crespo que el legajo por el supuesto delito de Hurto, se originó cuando una mujer -de 39 años de edad-, denunció que de la vivienda de sus padres, ubicada en Zona Sur de Nogoyá, faltaban ahorros. La detección se habría producido cuando la señora mayor, se dispuso a guardar una nueva suma reunida, la cual escondía en un lugar preciso y poco habitual de la casa. Desde hacía 4 meses que no revisaba esos valores, advirtiendo con desazón que habían sido víctimas del accionar delictivo de un desconocido hasta ese momento.
El período de tiempo establecido para sentar las sospechas fue de unos 120 días, lo que torna compleja cualquier averiguación de campo para la fuerza de seguridad. Aunque nunca visualizaron roturas o cambios en el sector donde camuflaban el dinero, debía ponderarse que los moradores damnificados solían recibir visitas. También se ausentaban del domicilio por períodos considerables, ya que por cuestiones graves de salud de uno de ellos, viajaban para la realización de tratamientos médicos. Sin embargo, efectivos de la Sección Robos y Hurtos no escatimaron esfuerzos y comenzaron a trazar hipótesis.
Una minuciosa investigación sentó sospechas con alto grado de probabilidad en una ciudadana de 33 años, afincada en Barrio El Palomar de esa ciudad. Esta persona había pertenecido al entorno familiar de las víctimas -por una relación sentimental con un familiar directo-, frecuentando la escena del ilícito en el plazo en que se habría ido perpetrando el hurto.
Varios testimonios recabados apuntaban a una maniobra de compra-venta de dólares en forma particular, protagonizada por la sindicada; como así también adquisiciones de mercadería de elevado valor, por pago contado.
Con el sustanciado informe elaborado por la División Investigaciones, la Fiscalía avaló el pedido de allanamiento y requisa domiciliaria, el cual fue otorgado por el Juzgado de Transición y Garantías, a cargo del Dr. Gustavo Acosta.
En un primer momento y a instancias de ser notificada del procedimiento, la acusada intentó ocultar el dinero que tenía en su poder y la comprometía. Pero una exhaustiva búsqueda comenzada por los efectivos en la mañana de este domingo, se extendió hasta las primeras horas de la siesta, pudiendo comprobar la certeza de la presunción. Se procedió al formal secuestro de una importante suma de dinero, discriminada en dólares y pesos; como así también bienes sospechados de ser adquiridos fruto de la utilización de los ahorros buscado, tales como un televisor Smart 50" marca Noblex; dos cubiertas Roadwing 185/65/R14; tres teléfonos celulares, de marca y modelos modernos; entre otros elementos que fueran denunciados como sustraídos.
Todos los elementos quedaron a disposición de la magistratura interviniente, que podrá avanzar con la Investigación Penal Preparatoria y llegado el caso, penar a la persona inculpada, quien desde hace un tiempo terminó con el vínculo que la mantenía cerca de los damnificados.