La ciudad de Santa Fe fue escenario durante este fin de semana de los asesinatos de dos mujeres de 59 y 85 años, y de un hombre de 63, por el cual fue detenido su hijo de 19.

El parricidio se produjo en el Padre Vieyra y Pasaje Koch, del barrio Las Lomas, al noroeste de la capital provincial, y la víctima fue identificada como Mariano Aguirre, quien pertenencia a la comunidad Qom.

Aparentemente, Aguirre, de 63 años, mantuvo una fuerte discusión con su hijo, de 19, quien tomó un palo y le efectuó varios golpes.

El muchacho escapó y los vecinos alertaron a la Policía local, cuyos efectivos acudieron a los pocos minutos y se encontraron muerto con mortales heridas en el cráneo.

El joven fue detenido a pocos metros de la casa, en aparente estado de ebriedad, y fue puesto a disposición del fiscal Andrés Marchi, quien tomó intervención en el caso.

Otro de los crímenes se produjo en la zona de Laguna Paiva, donde Herminda Díaz, de 85 años, fue encontrada el pasado viernes muerta, atada y amordazada, además de golpeada, en su casa de Sarmiento al 1.600, la cual había sido prendida fuego.

Los bomberos encontraron el cuerpo de la víctima en una zona de la casa que no había sido alcanzada por las llamas, indicó el sitio del diario El Litoral.

Por último, una empleada del Centro Operativo de Emergencia Municipal (COBEM) fue hallada asesinada de un golpe de adoquín en el cráneo.

El asesinato tuvo como víctima a Graciela Mendoza, de 59 años, quien fue hallada muerta en medio de un charco de sangre en su vivienda de Llerena al 4.100, en la zona de Ciudadela Norte.

La casa presentaba un gran desorden y se notaron faltantes en el lugar, por lo que no se descarta que el homicidio se haya producido en ocasión de robo.