Emergencia con final feliz en María Grande: “Ella fue quien salvó mi vida al realizarme maniobras de RCP”

La semana pasada, la enfermera Florencia Mendoza estaba realizando su suplencia en el Centro de Salud Germán Rico de Barrio Castaldo, en María Grande, cuando cerca del mediodía una vecina entró al centro, asustada, porque un chico de la Brigada de Abigeato estaba descompuesto. Florencia acudió de inmediato hacía la Brigada para auxiliar al efectivo Amilcar Albornoz.
Al encontrarse con Amilcar tirado en el piso, con dolores en el pecho y casi inconsciente, se llamó a la ambulancia. Mientras esperaba la misma, Florencia le realizó masajes cardíacos en el pecho. Pero los síntomas vitales estaban elevados, así que la enfermera decidió continuar con el plan de que había que trasladarlo al sanatorio, pero ya en el móvil de la Brigada y de inmediato.
En el trayecto al sanatorio, Albornoz comenzó a descompensarse, perdiendo el conocimiento. Ahí Florencia comenzó a realizarle maniobras de RCP en dos oportunidades. Luego se llegó al sanatorio para que el efectivo sea atendido por los médicos, publicó María Grande al Día.
Pasados unos días, Amilcar Albornoz regresó al centro de salud, pero no por una urgencia, sino para agradecer la intervención de Florencia y se lo reconoció haciendolo público en sus redes sociales con el siguiente mensaje: “Esta gran persona que puso Dios en el momento preciso es Florencia Mendoza, enfermera de centro de salud de María Grande. Ella fue quien salvó mi vida al realizarme maniobras de RCP. Eternamente agradecido de por vida, gracias muchas muchas gracias Florencia. Que Dios te ilumine siempre”.