Piñón Fijo habló como Fabián Gómez por su conflicto familiar y pidió disculpas
Piñón Fijo habló por primera vez como Fabián Gómez para dar su versión sobre el conflicto familiar que tiene con sus hijos, quienes lo acusaron de maltratador. Fue a través de un comunicado que compartió en sus redes sociales.
El drama del histórico animador infantil comenzó el viernes, cuando había publicado unas historias de Instagram dando a entender que sus hijos no le permitían ver a sus nietos. Pero la sorpresa para propios y extraños llegó cuando sus hijos Sol y Jeremías, quienes trabajaron una gran cantidad de años junto a él, lo desmintieron y redoblaron la apuesta al acusarlo de maltratador, humillador y violento.
“Hola gente, habla Fabián Gómez, la persona que interpreta a Piñón Fijo. De más está decir que fueron días difíciles, no solo por mí sino por los que amo, quiere y que pagan las consecuencias por mis acciones”, comenzó en el comunicado.
Y añadió: “Debo reconocer que soy enfático a la hora de defender mis posturas. Cuando estoy convencido de algo no ahorro energías a la hora de pelear por lo que creo justo y muchas veces objetivamente quizás no siempre lo sea”.
Por último, reconoció: “Nunca pensé que este posteo tomara tanta dimensión y que generara tanto dolor en mis hijos particularmente. Me arrepiento y pido disculpas por eso.También tendré que aprender que muchas veces lo que uno lee como enfático del otro lado se recibe como maltrato o humillación. Y si del otro lado hay un ser amado, es mucho más grave”.
El comunicado completo
La acusación de su hija
“Hace ocho meses que no veo a mi padre porque está desaparecido de nuestras vidas después del último de tantos maltratos (en mi semana 32 de embarazo). Y fue el último porque no me animé a poner límite a las humillaciones crónicas después de 35 años”, reveló Sol en su extenso comunicado.
Y continuó: “No es la primera vez que se aleja de todos, pero no obstante, siempre me las ingenié para que se siga viendo con Luna. Fue algo que siempre defendí, a pesar de las diferencias de adultos”.
“No se puede tapar el sol con las manos. No puedo permitir que más nadie de mi familia salga herido”, concluyó.
NA