Que una institución dedicada al cuidado y atención de los adultos mayores cuente con una habilitación definitiva, no sólo otorga seguridad a los familiares de los residentes, sino que además les abre puertas para realizar gestiones tendientes a sustentar mejor su calidad de vida y acceder a ayudas para sostener la permanencia.

Silvio Heinz, presidente de la cooperadora del Hogar San Francisco de Asís, confirmó a FM Estación Plus Crespo: "Ha sido un gran logro, después de una lucha maratónica; porque estuvimos dos años con habilitaciones provisorias -por 6 meses y en ocasiones, por un año-, y después de muchas gestiones, presentación de papeles, planos y demás, pudimos conseguir la habilitación definitiva. Antes del cierre de año, desde Provincia nos llegó la certificación, por una capacidad de 39 camas".

"Es una alegría enorme, porque podemos trabajar distinto, nosotros como institución y también las familias de nuestros abuelos, que ahora podrán tramitar ante PAMI, IPRODI, y organismos similares, los beneficios y subsidios que hay para residentes. Sabido es que hoy el importe de una jubilación mínima no alcanza para cubrir la cuota mensual, de manera que era muy esperada esta certificación. Fueron muchas personas las que han colaborado, se han movilizado por este objetivo, han acompañado esto y a todos los actores les agradecemos mucho", manifestó Heinz.

El dirigente sostuvo que "apuntaremos ahora a que Salud Pública nos incorpore el personal o parte del personal a su órbita, como para reducir el presupuesto que necesitamos y así hacer que sea más accesible para el familiar. Hay que tener en cuenta, que supimos hacer actualización de cuota en forma anual, pero actualmente con la inflación, el incremento de tarifas y demás, la cuota mensual se cambia prácticamente cada dos meses. Esperamos que se estabilice la economía, porque así hoy nos resulta imposible poder cubrir los gastos de la institución -que son elevados-, sin que impacte en lo que abonan los familiares".

Heinz afirmó que "en Crespo existe una alta demanda de este tipo de servicio, por eso nuestra capacidad está cubierta y con una gran demanda de ingresos. Sabemos que algunos hogares cierran y a los abuelos hay que reubicarlos, otro tanto son ingresos por primera vez a una institución, de manera que tenemos una extensa lista de espera. Entendemos la desesperación que a veces produce la espera o el comunicarles que no tenemos posibilidad, pero no podemos superar la capacidad para la que fuimos habilitados", afirmó.