Chajarí pidió a la Provincia poder habilitar fiestas y eventos sociales

La administración del intendente Pedro Galimberti (Juntos por el Cambio) plantea que de ese modo se combatirá la realización de las fiestas clandestinas, que se desarrollan en distintos puntos de la provincia. «A más de 6 meses de iniciada la primera fase del aislamiento social, preventivo y obligatorio muchos son aún los sectores que no reanudaron sus actividades en el contexto de la 'nueva normalidad'», plantea en la presentación. Y entre estos ubica a organizadores de eventos sociales, DJ´s, gastronómicos, locales bailables, ambientadores y «muchos otros rubros están todavía en fase uno».
A la vez, alerta que «regularmente se constatan encuentros sociales en contravención a las normas nacionales y provinciales, muchos de los cuales requieren la intervención de las fuerzas de seguridad. Los trabajadores de estos sectores, por un lado, y los jóvenes, por otro, adquieren cada vez más visibilidad reclamando ser considerados en la formulación de políticas públicas en el contexto de emergencia sanitaria y post-pandemia. Sin embargo, desde el Estado, en Entre Ríos, no hay un horizonte claro sobre cómo empezar a salir de esta situación y proyectar escenarios de futuro que nos permitan convivir con el virus en forma segura y responsable. Desde el Gobierno de Chajarí estamos convencidos que, en este contexto, debemos actuar con anticipación, sobre todo considerando la proximidad de la temporada estival, ya que si no se toman decisiones a tiempo el panorama podría agravarse».
En realidad, Chajarí fue noticia nacional por el festejo por el Día de la Primavera que se realizó el domingo por la noche y que copó las calles de la ciudad en medio de la pandemia por el coronavirus.
En base a la demanda existente y a las situaciones de hecho que se han dado, la Municipalidad de Chajarí comenzó a trabajar en la elaboración de un protocolo de autorización con la participación de actores del sector: D´s, locales bailables y representantes de agrupaciones estudiantiles.
«Asumimos el compromiso de poner el tema del ocio seguro y responsable en la agenda de discusión pública, tomando la inquietud que, en general, nos llegó de estudiantes y de jóvenes de la comunidad. En este contexto, luego de unos días de trabajo, hoy formalizamos el envío de lo que pretendemos que sea un aporte a la discusión de estos asuntos en el seno del Comité de Emergencia Sanitaria Provincial pero que, además, es una contribución que podría ser el disparador de algunas conversaciones en otras localidades entrerrianas», dijo Galimberti.
Qué establece
El protocolo, dicen desde el Gobierno de Chajarí, se propone «como una solución al impedimento de trabajar que hoy tienen quienes están involucrados en los sectores del ocio, pero también se ofrece como una alternativa para garantizar el desarrollo de prácticas de ocio seguras y responsables que hoy se dan por fuera de la legalidad.
«Se podrán realizar eventos sociales en superficies cerradas con la participación de hasta un máximo de 30 personas, siempre que el establecimiento disponga del espacio suficiente para garantizar 1 persona cada 5 mt2», dice el proyecto elevado a la Provincia.
Respecto de las reuniones en sociales en espacios abiertos, se podrán realizar «con la participación de hasta un máximo de 300 personas, siempre que el predio disponga del espacio suficiente para garantizar 1 persona cada 20 mt2».
Y se fija que los días para la realización de esas actividades sea viernes, sábados y vísperas de feriado, de 20 a 3 «o a criterio de la autoridad municipal considerando los usos y costumbres de la localidad y las características del evento», consignó Entre Ríos Ahora.
Respecto del control de accesos, el proyecto sostiene que el mismo «estará a cargo de los organizadores del evento y se deberá llevar a cabo con el instrumento que resulte más conveniente. Esta medida obligatoria tendrá como finalidad garantizar que no ingresen mayor cantidad de personas que las permitidas en función de la capacidad del espacio disponible. En el acceso también se deberá realizar el control de temperatura con un termómetro sin contacto y no se permitirá el ingreso de personas que tengan sintomatologías asociadas al Covid-19».
Aunque también habrá inspección a través del Área de Inspección General durante el desarrollo del evento «a los efectos de constatar el cumplimiento de las normativas y pautas establecidas en el protocolo y en caso de incumplimiento aplicará las sanciones estipuladas en el Código de Faltas Municipal».
Entre las «medidas generales de bioseguridad» a solicitar a los organizadores se prevé la imposición de «mantener una distancia mínima de dos metros entre las personas, se recomienda la higiene asidua de las manos, desinfección de superficies, ventilación de ambientes y toser en el pliegue del codo». Además, «se recomienda el uso de tapabocas en espacios abiertos, al aire libre. Este dispositivo de protección personal será obligatorio en espacios cerrados».
En el establecimiento o predio, además, «se deberá contar con cartelería informativa y de prevención del Covid-19″. Y se deberá contar con stock suficiente de alcohol en gel, mascarillas, alfombras sanitizantes, guantes y el equipo de protección necesario para el personal».
En las fiestas en las que haya barras de tragos, los pedidos de los asistentes «se hará instalando elementos de protección que garanticen la distancia interpersonal». Y se insta a que el personal utilice elementos de autoprotección como pantallas faciales y mascarillas y deberá lavarse las manos frecuentemente durante el servicio».
Además, se prevé que «los vasos y demás elementos para el servicio de bebida serán desechables» y que durante el desarrollo del evento los organizadores «dispondrán de personal dedicado exclusivamente a la limpieza y desinfección de las instalaciones».