Grávida Crespo lleva adelante una campaña para bebés
“El niño Jesús nació en un humilde pesebre. En esta Navidad, tengamos un acto de caridad pensando en las nuevas vidas. Colaborar con un pañal es una buena acción que podemos hacer”, recordó el Padre Rubén Schmidt a la feligresía, al difundir la campaña que lleva adelante Grávida Crespo. Griselda Queen, vocera de la institución sin fines de lucro, con a FM Estación Plus 94.3: “Con esto de que se acerca Navidad, apuntamos a tocar un poco el lado solidario de la gente. La campaña surge a nivel nacional, porque hay Centros Grávida de atención a la vida naciente en todo el país, son más de 50. Desde Grávida Central, que está en San Pedro, provincia de Buenos Aires, surgen campañas y esta es una de ellas, a la cual hemos adherido. Se convoca a la comunidad a donar pañales, que serán entregados a las mamás embarazadas o con bebés chiquitos que necesiten de los mismos. La prioridad es la demanda local. Si en la campaña colectamos más de lo que necesitamos, entonces avaluamos la posibilidad de llevarlo a otra institución, como lo hemos hecho ya con el Hospital San Roque de Paraná, o a algún Centro Grávida del país que lo esté necesitando, porque hay realidades muy angustiantes y urgentes por atender”.
La campaña se extiende durante todo el mes de diciembre y para los interesados en colaborar, la mujer informó: “Pueden acercarlo a las Parroquias del Rosario o San José, en los horarios de secretaría o de misa, indicando que es para Grávida y luego los reuniremos”. Asimismo, agregó: “En Crespo tenemos demanda de pañales. No obstante, estamos también regalando ajuares o viendo la necesidad de quienes se acercan a nosotros. Nuestro trabajo es el acompañamiento y contención de cualquier mamá embarazada o papá, que estén pasando una situación difícil con el embarazo”.
Pensando en el año que pasó, Queen manifestó que el grupo humano de Grávida Crespo se encuentra comprometido y dispuesto a renovar esfuerzos durante el 2018. Además, a modo de balance expresó: “El balance de cada año es bueno, porque vamos creciendo, aprendiendo y pudiendo llegar un poquito más o mejor a las necesidades. Hay cuestiones o situaciones preocupantes e intentamos contribuir, ser una alternativa. Hemos hecho talleres en las escuelas, que ha sido un gran paso, sobre todo por poder tener contacto con los adolescentes, que por ahí tratan al aborto con naturalidad o como una opción más. En las charlas con alumnos, hemos podido exponer otra opción. No vamos con una verdad cerrada, sino con una propuesta de vida, desde la actitud de escucharnos, del diálogo sin confrontar, sino mostrando que podemos conversar puntos de vista y ofrecer alternativas para aceptar la vida”.