Como cada año, la conmemoración del Día de la Donación de Órganos, es una fecha propicia para trasladar conceptos informativos a la población y propiciar la predisposición y realización -llegado el caso-, del noble gesto de donar una esperanza de vida a una persona cuya salud está en estado crítico.

Alumnos de los 5º año del Instituto Comercial Crespo, el Instituto Sagrado Corazón y el Instituto San José, crearon y llevaron adelante en la mañana de este martes, un programa de radio centrado específicamente en la temática. El mismo fue transmitido por FM Estación Plus Crespo, estudios radiales desde los cuales los estudiantes abordaron conceptos y mantuvieron entrevistas con diferentes actores sociales ligados a la donación de órganos.

Entre ellos, el programa incluyó las declaraciones de la médica especialista en Terapia Intensiva y miembro de CUCAIER, Dra. Juliana Bournissen, quien manifestó: "Entre Ríos tiene su delegación, con importante prestigio en lo que refiere a cantidad de donaciones, que son producto de la sensibilización social. Trabajamos organizadamente y coordinados desde el INCUCAI, que es el organismo nacional. Donantes somos todos, desde que tenemos la Ley Justina, tanto de órganos como de tejidos y células. Excepto aquellas personas que expresamente han manifestado su voluntad en contrario, ante alguno de los organismos oficialmente habilitados a ese fin. Cabe mencionar, que donar sangre también es un acto solidario y que siempre el resultado es ayudar a otros que están con un delicado cuadro de salud y cuya continuidad con vida y con calidad de vida, depende de un trasplante".

En tal sentido, y para tranquilidad de los ciudadanos, la médica expresó: "Los que donan órganos deben fallecer bajo circunstancias estrictamente neurológicas, para lo cual uno tiene que hacer un diagnóstico preciso de lo que se llama 'muerte cerebral', por un determinado período de tiempo, que lo hace irreversible y que incluye todo un protocolo".

En consonancia con ese pensamiento, la integrante del CUCAIER lamentó que "por estos días un precandidato a presidente ubique a la donación de órganos en un escenario de comercio, cuando el espíritu está muy alejado a ello". Asimismo, echó por tierra algunos mitos, entre los que destacó: "Creer que se puede meter a una persona en una bañera, ponerle mucho hielo y sacarle los riñones; es algo muy irreal. Es inviable si uno analiza por unos segundos, todo lo que implica un Protocolo y el procedimiento. Además del sector médico, del que participan camilleros, enfermeros, médicos, cirujanos, profesionales de laboratorio y otras disciplinas; también participan Bomberos Voluntarios y Policías, para esos operativos. Está involucrada toda la sociedad para generar los cordones de seguridad que son necesarios a la hora de trasladar los órganos. Si se analiza el proceso, se deduce rápidamente que es prácticamente imposible hacerlo a escondidas o con la complicidad de una gran cantidad de personas. Una ablación y un implante, significan muchos años de formación profesión; además de que el paciente tiene que estar con la asistencia que provee un quirófano, la medicación pre y pos-trasplante. Un pensamiento coherente, advierte que es imposible la clandestinidad".

Con mensajes positivos y esperanzadores, los estudiantes también estuvieron presentes en la zona céntrica, con cartelería alusiva y repartiendo folletos y brazaletes, a modo de recordatorio para reflexionar sobre este acto solidario.