La fuerte contracción de la economía no asusta a la consolidada marca italaina de automóviles deportivos. Tampoco la megadepreciación del peso y el valor del tipo de cambio actual. El optimismo de la automotriz sigue intacto y con ello su desembarco en el país con un plan de expansión ambicioso.

La firma contará con un local en la localidad bonaerense de Vicente López con una amplia gama de vehículos premium fabricados directamente en su casa matriz de Mirafiore, las cuales se comercializarán con las opciones de personalizado que cada cliente elija. Entre ellos estarán el Levante Q4 (350 hp), el Levante SQ4 (430 hp) y el Quattroporte en sus versiones S (V6, 430hp), SQ4 (V6, 430 hp con tracción integral) y GTS (V8, 550hp.). Además, se podrá optar por el Ghibli (un sedán segmento E) en las versiones S (430 hp) y SQ4 (430 hp, con versión integral), GranTurismo y el GranCabrioen las versiones Sport y MC, ambas con 460 hp. 

Maserati a nivel local es licenciada por Modena Auto Sport (antes Gruppo Modena), cuyo socio mayoritario es el juninense Málek Fara, corredor de GT2000, con el 50% de las acciones, en conjunto con Cristiano Rattazzi, presidente de FCA; Julio de Marco, ex presidente de Módena; y Claudio San Pedro.

"Cada Maserati es como una obra de arte construida con el cuidado y la atención que sólo la mano del hombre puede proporcionar", explicó Fara y añadió que dicha marca "garantiza elegancia, sofisticación, seguridad, a bordo de un deportivo de elite. La propia sangre italiana garantiza una pasión y emoción al conducir creando una sinergia entre el vehículo y quien lo conduce. El placer que se obtiene al conducir un Maserati hace que la conducción no sea una necesidad sino un deseo. En Maserati estamos convencidos de haber podido acercarle al cliente argentino la puerta de entrada a un nuevo mundo extraordinario", concluyó Fara. 

En la elección del cliente estarán poder optar por los paquetes GranLusso, con un perfil más de confort y GranSport, para quienes deseen una estética más deportiva. Leandro Fara, a cargo de la división de Marketing de la marca, sostuvo: "quien se sube a un Maserati, se sube a un auto concebido en lenguaje de diseño italiano. En la parte delantera, la agresiva parrilla, con sus barras cromadas, es más imponente que nunca. Al mismo tiempo, los vehículos conservan el estilo atemporal de Maserati, con el noble Tridente de Neptuno dirigiendo el camino hacia delante. Los estrechos faros dirigen la mirada a través de las aletas delanteras a la icónica triple salida de ventilación de las mismas. El logotipo Saetta en la afilada parte trasera terminan de cerrar el concepto".

El primer showroom oficial y exclusivo de Maserati no apunta a ser el único. La empresa tiene en vistas a futuro una ampliación de la red de concesionarios hacia otros puntos del país como Rosario, Córdoba, Mendoza, Salta y Neuquén.