Crespenses preparan 300 viandas para personas en situación de calle: Cómo sumar tu solidaridad
La Asociación Civil sin fines de lucro "Suma de Voluntades" tiene amplia trayectoria en la capital provincial, por su trabajo en pos de socorrer a los sectores más vulnerados. Con los años ha ido generando filiales en diferentes localidades, que adhieren a esa importante tarea social. Lo propio ocurrió en Crespo y un grupo de quienes protagonizan esta cruzada solidaria en forma permanente, contaron su experiencia a FM Estación Plus Crespo, instando a la participación.
Una de las integrantes, Soledad Portillo, explicó: "Es una ONG que en Paraná tiene varios años y que desarrolla varias actividades. Tiene merenderos, apoyo escolar en los barrios y otra de las actividades, es darle de comer a la gente que está en situación de calle. Así empezó, lo que se llama para nosotros 'las recorridas'. Que consiste en ir a la noche, ver la gente que está durmiendo en la calle -por distintos motivos- y se les lleva un plato de comida. Hoy se extendió un poco más que a la gente en situación de calle, alcanza a quienes están pasando por una situación complicada, familias con muchos niños, personas que necesitan un plato de comida. Algo tan básico y tan simple como un plato de comida".
Destacó que "si bien Crespo tiene otra realidad, no tenemos gente en situación de calle; hay personas con necesidad por distintos motivos y en esos casos, también tratamos de estar presentes, ayudando a esas familias en esos momentos. Cuando nos han llegado casos así, hemos intervenido y tratado de ayudar, de darles una mano. Podemos canalizarlo por Desarrollo Social, por las Iglesias, porque es menos la cantidad de gente en situación de vulnerabilidad. Suelen ser problemáticas momentáneas, pero en Paraná, esas realidades son permanentes y en cantidad lo supera".
Recordando el punto de partida de esta noble acción, relató: "Empezó como un grupo pequeño, que vio esa realidad. Gracias a Dios en Crespo no la vemos. Con un grupo de amigas vimos dos nenitos -de 6 y 8 años-, que estaban pidiendo en la zona de la Catedral, con la mamá. Una realidad injusta para los chicos y dijimos 'qué podemos hacer por esos chicos. En qué podemos un poquito ayudarlos'. Y un amigo de Crespo, que ya colaboraba con Suma de Voluntades, nos comentó de estas acciones. Así empezamos a cocinar, hace 3 años, para 40 personas que vivían en la calle. Hoy eso se extendió a 300 personas, que están viviendo en la calle ó que tienen su pensión ó un lugarcito para vivir, pero buscan su plato de comida", especificó Portillo.
Por su parte, Patricia Gottig comentó: "Ellos hacen recorridas nocturnas todos los días, relevan y asisten a las personas en situación de calle. Cuatro días a la semana se ocupa Suma de Voluntades de esta acción solidaria. Crespo colabora con la asistencia del primer lunes de cada mes. Es decir, ellos -como organización central- se desentienden ese primer lunes de cada mes. Nosotros nos ocupamos de conseguir los insumos para cocinar, elaborar la comida, ir y hacer la recorrida de entrega. Para las personas a las que llegamos, es mucho un plato de comida, pero también por ahí llegamos con ropa -principalmente abrigo en esta época-, les preguntamos qué necesitan, cómo estás, se produce un encuentro, un abrazo, es el compartir un ratito con ellos, poder charlar y empatizarnos con esas necesidades, que no son solo un plato de comida. Pasa por algo mucho mayor, que es el ser tenidos en cuenta, ser escuchados, ser vistos".
Iván Ríos, también partícipe desde esta ciudad, sostuvo: "Muchas veces la gente que se va enterando de lo que hacemos, nos ayuda; y si no alcanza, ponemos nosotros un granito cada vez. Lo que falte, lo compramos y nos repartimos los gastos entre nosotros. Hoy en día se están preparando 300 viandas, que habitualmente cocinamos en horas de la tarde, para llevarlas al anochecer. Se empieza a las 15:00 -del primer lunes de cada mes-, se cocina, se arman las porciones en bandejas descartables -de aluminio para que se conserven calentitas-, se las lleva a Paraná y hacemos la recorrida donde lo repartimos. Se carga también en la camioneta lo que nos donen, a veces factura, pan, frutas, lo que se pueda conseguir. Aproximadamente a las 20:00 se empieza el recorrido en Plaza de Mayo, siguiendo por la Plaza del Bombero y así hacemos todos los puntos que están planificados. Se entrega en mano, a gente que ya está identificada al momento del relevamiento".
"En un año se multiplicó todo", afirmó Ríos al revelar que pasaron de unas 40 a 300 viandas. Al respecto, dió cuenta que "se están usando aproximadamente unos 30 kilos de carne, 25 kilos de pollo, unos 40 paquetes de fideos, arroz, varios kilos de cebolla, de papa, morrón, todo lo que nos donan es bienvenido, porque nos sirve un montón, es mucho lo que reduce el costo. Ahora recibimos una donación de una persona que nos ofrece las cargas de gas para las garrafas para cocinar. Se comprometió con eso y la verdad que es un montón. Todos ponemos algo y en la suma, hay diferencia. Además del tiempo que regala cada colaborador, que también es valioso y es un momento lindo, que compartimos, nos juntamos, se ha armado un lindo grupo".
"Cada uno tiene sus motivaciones que lo llevan a hacer esto, pero entendimos que había que visibilizarlo, porque al conocerse, aparece una red humana hermosa, que nos está empezando a acompañar cada vez más", afirmó Melisa Senger, quien agregó: "Empezamos a hacer Historias, subir videos cada uno en forma particular. Tenemos un grupo de WhatsApp que empezamos cuatro y hoy somos casi 30 personas. Vamos recibiendo consultas de cómo colaborar, cómo ayudar. Si bien no estamos estructurados en Crespo, Sole un poco bandera la causa y el resto vamos opinando, consiguiendo donaciones, Iván y Juan Pablo Schonfeld siempre están firmes cocinando y todos vamos colaborando en la elaboración y el armado. Juan generosamente está cediendo su casa como un lugar para cocinar. El cuartel y Club Ferro también nos han prestado sus instalaciones para cocinar ahí, cuando se han hecho cosas a la parrilla. Se va haciendo lo que se puede, desde un guiso hasta patamuslo a la parrilla. También hay gente que integran peñas, que se han enterado y ofrecen cocinar ellos. Ahora que son muchas porciones, felizmente se han sumado colaboradores".
"Gracias a Dios recibimos muchas donaciones -de ropa, frazadas, calzado, por ejemplo-, y las llevamos a la sede, como para que ellos organicen y puedan repartir de manera más ordenada, que lo que a veces dejamos en las recorridas para paliar el frío de quienes duermen en la calle", manifestó Gottig. La integrante referenció que "Suma de Voluntades Paraná tiene atención a las infancias, los días sábados en unos merenderos, de manera que toda donación es útil. Acá ayuda mucho la gente y ellos lo saben, nos esperan. Lo mismo que se cocina bien, abundante y haciéndolo como si fuese para nosotros".
Los crespenses que forman parte de esta cruzada solidaria permanente, resaltaron que "no se trata de asistencialismo, sino que se busca que esa gente encuentre oportunidades y salgan de esa situación de calle. En los relevamientos, la ONG conoce un poco más de cerca la historia de cada persona a la que va a ayudar: por qué llegó a esa situación, si tiene alguna red de contención, de qué manera podría volver a tener su propia subsistencia. Hay algunas instituciones también que trabajan de manera mancomunada. Y se va viendo cómo mejora cada situación. Hemos tenido un montón de casos donde nos venimos súper amargados y tristes, en otros súper felices, de que la persona ya tiene un trabajo o está buscando un lugar para alquilar. Es una causa que lleva a que uno no baje los brazos. Con ese granito solo, que parece muy chiquito, entre todos se mueve la realidad de otra persona", afirmó Senger.
Portillo acotó que "es un propósito a largo plazo. Empezamos con 40 porciones y ya son 300. Nuestro ideal es volver para abajo en la cantidad de porciones, porque significaría una realidad más alentadora. Me parece importante mencionar que lo primero que a uno le sale decir es 'están así porque quieren' y esta experiencia permite ni más ni menos que ver la realidad. Son personas que los cruzás y ni siquiera los saludás tal vez, por eso a muchos de los que ayudamos, les llama la atención que nos sentemos, que hablemos. Atrás de cada persona hay una historia, casi siempre durísima, que te lleva a entender por qué llegó a esa situación. Nos ha enseñado entonces a nosotros, a no juzgar. Lamentablemente, muchas de las situaciones están atravesadas por las adicciones. La gente mayor, al alcohol y los más jóvenes a las drogas. También hay adultos que vienen y dicen 'con la jubilación no me alcanza. O pago la pensión, o como'. Son las grandes franjas de problemáticas que vemos".
Denotando la emotividad que genera y mueve al grupo solidario crespense, Senger expresó: "Ver al otro y no ser indiferente, ser la voz del que no puede, es lo que impulsa. Pensar que yo tengo muchas más posibilidades y por la vida -injustamente- otro no. Y no tengo que hacer mucho más ni grandes cosas, con apenas un poco, puedo cambiar una realidad. Entonces nos entusiasma cambiar realidades e invitamos a quienes quieran unirse a este propósito, a contactarse con cualquiera de los integrantes del grupo".