Imaginá un robot que, con solo decirle “ordena la cocina”, deje todo impecable. Aunque aún no estamos ahí, el modelo p0.5, creado por Physical Intelligence, nos da un adelanto de ese futuro. 

Este sistema, diseñado para entornos reales y desconocidos, representa un salto en la robótica doméstica al combinar visión, tacto e instrucciones verbales para realizar tareas como organizar habitaciones o recoger cubiertos.

En pruebas, p0.5 logró completar el 90% de las órdenes, desde “guarda los platos” hasta “arregla el dormitorio”, incluso en espacios nuevos como apartamentos alquilados. 

Entrenado en 100 entornos diferentes, este modelo de Visión-Lenguaje-Acción (VLA) puede adaptarse a interrupciones y ajustar sus planes, imitando la flexibilidad humana. Sin embargo, no es perfecto: a veces comete errores y su velocidad deja que desear —los videos de sus hazañas se aceleran hasta 10 veces para no aburrir.

El robot, equipado con un brazo-pinza, ruedas y cámaras, es grande y su instalación parece más propia de una misión táctica que de un hogar. 

A pesar de estos inconvenientes, p0.5 demuestra que la robótica doméstica avanza hacia un futuro donde los robots podrían ser tan comunes como los electrodomésticos, aunque aún necesiten pulir su rapidez y practicidad.