En consonancia con el planteo realizado por Maestros Mayor de Obras de la ciudad, un grupo de siete arquitectos pertenecientes a la Delegación Crespo, elevaron al Concejo Deliberante una nota en la que solicitaron abiertamente “que se convoquen a mesas de trabajo a todos los profesionales afines a la temática, donde se puedan plantear, debatir y resolver democrática y profesionalmente los cambios a introducir en las ordenanzas y las decisiones urbanas respecto de una planificación estratégica, guiada a un modelo de ciudad consensuado y sostenible en el tiempo”.  

Los profesionales afirmaron haberse anoticiado por los medios de comunicación de la existencia de dos proyectos claves para su desempeño laboral y para la urbanística de Crespo. En tal sentido indicaron: “Consideramos que es de suma necesidad realizar modificaciones y actualizaciones en los Códigos vigentes, pero entendemos que este no es el modo de llevarlo a cabo. Ante la situación que se dio a conocer el día jueves 9/11 del corriente en los medios de comunicación local, donde se informa a la comunidad todo el ingreso al Cuerpo Deliberativo de proyectos de ordenanzas, como la aprobación del nuevo Código de Edificación de la ciudad de Crespo y el nuevo Código de Normas Básicas de Uso, Ocupación y Subdivisión del Suelo; ambos presentados por el bloque de concejales Crespo Nos Une, sin ningún tipo de consultas ni puesta a consideración por parte de los profesionales locales competentes en la materia (arquitectos urbanistas, ingenieros, maestros mayores de obras, agrimensores, agentes inmobiliarios, entre otros), nos vemos en la obligación profesional de solicitar en una primera instancia y a modo general, al menos se nos notifique formalmente a cada una de las Delegaciones o en su defecto, a los profesionales de manera particular, lo que ambos proyectos pretenden modificar, así como también el motivo y argumentación de los cambios introducidos en los Códigos”.

“Como arquitectos entendemos que para definir un Código, algo tan fino y puntual, primero debemos tener en claro qué modelo general de ciudad buscamos y queremos como comunidad; además del estado actual de las infraestructuras de servicios con las que cuenta la ciudad (agua, desagües cloacales y reutilización de aguas servidas, alumbrado eléctrico, gas, etc.) y si estas están previstas para un nuevo uso del suelo en función de concentraciones, aumentos y/o expansiones de la trama urbana, las curvas de nivel que presentan los diferentes sectores, la concreción de espacios verdes, la ubicación de equipamientos diferenciados y la determinación de sitios de interés”, expresaron los arquitectos en la nota ingresada. Al mismo tiempo, señalaron que el espíritu de ambas normas es tema de agenda en el colectivo del sector y al respecto manifestaron: “Recordamos al bloque Crespo Nos Une y al Ejecutivo Municipal, que la presente Delegación viene trabajando hace varios meses en el análisis, diagramación de la planta urbana, redefinición del modelo urbano y revisión a conciencia de los Códigos de Edificación y Subdivisión del Suelo vigentes, además del plan efectuado por el Arquitecto y Urbanista Rubén Pesci ‘Lineamientos estratégicos para el modelo urbano sustentable – MICRA’ - Fundación CEPA en diciembre 2012; proyecto que toda la comunidad financió y a la que necesariamente deberíamos prestar atención, con el fin de determinar un modelo de ciudad más óptima y efectiva, en función de los nuevos usos y necesidades concretas”.

Apuntando a la valoración del aporte que cada sector profesional podría introducir a los proyectos que se encuentran actualmente en comisión, los siete arquitectos firmantes solicitaron una mesa de trabajo conjunta, para “una planificación estratégica de nuestra ciudad, como instancia previa a la modificación de las ordenanzas, que se oriente a un uso adecuado del suelo, cuidado del medioambiente, y las particularidades sociales, culturales e históricas que nos representan”.

Tal como lo hicieran los Maestros Mayor de Obras en su presentación, afirmaron estar convencidos de que la discusión requiere de múltiples actores y ópticas, sobre lo cual señalaron: “Es un trabajo multidisciplinario y de líneas de acción multidireccionales, con un constante ida y vuelta entre Códigos, planes urbanos y modelos de ciudad; a lo que resulta imposible y obsoleto pretender modificar uno sin tener en cuenta los alcances del resto, ya que el resultado indefectiblemente derivará en resoluciones que no logran una aplicación concreta y/o variables contradictorias que quedan libradas a interpretaciones personales, como ya sucede en el Código actual y que necesariamente hay que revertir”.