El Padre Rubén Schmidt celebró 30 años de sacerdocio
Transcurrió un fin de semana especial para el Padre Rubén y así se lo hizo saber a la comunidad de Crespo, en oportunidad de dirigir la tradicional Misa de la Inmaculada Concepción de María en plaza Sarmiento. De hecho, compartió con la feligresía su satisfacción por cumplir 30 años de sacerdocio.
En declaraciones a FM Estación Plus 94.3, el cura expresó: “Es algo importante en mi vida. Hoy no me imagino siendo otra cosa que no sea sacerdote. Nunca dudé de serlo. Si bien hubo dificultades de todo tipo, porque no es una vocación fácil, tiene sus exigencias como cualquier otra vocación; pero lo esencial es recordar la misión para la que Dios nos ha elegido. Hoy soy feliz de ser sacerdote, porque además de las innumerables gracias que Dios me ha dado en lo espiritual y en otros aspectos, también me hizo conocer a tantas buenas personas. Si no hubiese sido sacerdote, no las hubiera conocido, entonces le debo mucho a Dios”.
“Aliento siempre a ser fieles a Dios”, dijo el Padre Rubén, que asume responsablemente su rol espiritual y social, al tiempo que anheló que más hombres sientan el llamado del Señor: “Hay que buscar esas vocaciones, que son tan necesarias, porque aún hay localidades que no tienen sacerdote”.