La expulsión ante San Lorenzo, que derivó de ese pisotón descalificado sobre Agustín Giay, fue la última imagen de Tomás Chancalay en Racing. El volante entrerriano de 23 años partió este miércoles rumbo a Dubai para incorporarse al Al Wasl que dirige Juan Antonio Pizzi. Y atrás dejó un vestuario que lo había apuntado por la seguidilla de tarjetas rojas y a una hinchada enojada por su conducta que pedía por su salida.

El club de Emiratos Arabes pagará 1.500.000 dólares brutos por el préstamo del atacante. La opción de compra está tasada en 3.700.000. Un negocio redondo para la Academia, que le compró el 50% del pase en 1.250.000 dólares y quería desprenderse del futbolista.

Chancalay, que jugó 80 partidos y marcó 17 goles con la camiseta celeste y blanca, había sido expulsado ante Godoy Cruz. Como volvió a ser echado en el clásico con el Ciclón, el Tribunal de Disciplina le dio tres fechas de suspensión. Por lo tanto, no iba a poder ser de la partida el sábado contra Argentinos Juniors en Avellaneda. De cualquier modo, el jugador hoy no estuvo en el entrenamiento. Bien temprano se tomó un avión con destino a Emiratos Arabes.

Hace una semana, en la vuelta a las prácticas, los referentes del plantel habían sido duros con Chancalay, quien ofreció disculpas. En el mismo sentido se expresó Fernando Gago. El técnico también estaba molesto porque decidió su ingreso en el entretiempo del duelo con San Lorenzo –en reemplazo de Matías Rojas- y a los 12 minutos fue expulsado por Fernando Espinoza a instancias del VAR.

Pizzi, quien pidió a Chancalay cuando llegó a Racing, volverá a dirigir al jugador. Había llegado en febrero de 2021 a préstamo, volvió a Santa Fe por el lapso de una semana para sumarse a la pretemporada y regresó al Cilindro cuando el presidente Víctor Blanco ejecutó la opción del 50% que había acordado con los dirigentes sabaleros.