Un joven oriundo de Bovril quedó imputado por el supuesto delito de “Hurto en Flagrancia”, después de protagonizar un procedimiento policial, desarrollado en inmediaciones de Ruta 32 y un camino vecinal de Seguí.

El Jefe de Brigada Paraná, Crio. Ppal. Leandro Peralta, precisó a FM Estación Plus Crespo: “Promediando las 19:00 de este viernes, en circunstancias en que se estaba llevando adelante un operativo prevencional de control vehicular e identificación de personas por la zona rural, se detuvo la marcha de un automóvil Nissan Versa, color gris, el cual presta el servicio de remis. La conductora presentaba la documentación exigible para circular y adujo estar realizando un viaje contratado, por lo que el personal se abocó a identificar a los 4 pasajeros. Los ocupantes eran todos empleados de una misma granja, ubicada en el ejido de Seguí, propiedad de una familia muy conocida en Paraná Campaña".

Una actitud temeraria hacia las consultas referidas a datos personales y vacilaciones en sus respuestas, generaron sospechas en los brigadistas, las que resultaron ser certeras y motivaron una judicialización de la situación. El funcionario indicó que “a instancias de solicitarles que exhiban el baúl, accedieron denotando nerviosismo y al abrirlo, se observó que transportaban una bolsa plastillera de contenido considerable por el bulto. Uno de los ocupantes se atribuyó la propiedad y voluntariamente puso a la vista el contenido, tratándose de distintas herramientas. Inmediatamente manifestó que se las habían regalado sus patrones”. 

A fin de ahondar o descartar la presunción, los uniformados idóneos en delitos rurales, establecieron comunicación telefónica con un integrante de la familia propietaria de la granja para la cual trabajan. “La señora negó haberles regalado herramienta alguna y adelantó que se dirigiría a la brevedad a formalizar la denuncia a la dependencia policial”, apuntó Peralta. 

La Brigada Paraná puso en conocimiento de lo acaecido a la Fiscalía de Investigación y Litigación en turno, a cargo de la Dra. Carolina Vives, quien ordenó el secuestro de los efectos sustraídos, como así también la restitución a la damnificada tras el debido reconocimiento. 

Por su parte, todos los ocupantes del rodado fueron debidamente identificados y elevados sus datos filiatorios a la justicia, recayendo la imputación sobre el joven que falsamente se atribuyó la propiedad de los bienes hurtados.