Las abundantes precipitaciones dejaron en evidencia los problemas de infraestructura que acarrea la Escuela Nina Nº 203 “Guaraní”, institución que actualmente dicta clases sin luz en algunas aulas o bien, reúne en un mismo espacio físico -donde no se llueva-, a alumnos de distintos niveles. Este martes, el director zonal intercambió reclamos y compromisos con padres, docentes y directivos, tras lo cual indicó a FM Estación Plus 94.3: “La reunión es para darles un poco de tranquilidad a los padres, confirmarles que se está trabajando, darle soluciones en lo inmediato dentro de lo que el tiempo nos permite. Uno de los problemas que me plantean es si se suspenden o no las clases, eso es algo que decide el Consejo General de Educación, aunque yo en el informe referido a lo edilicio trataré de pedir que las clases no sean dictadas con estas condiciones climáticas, ya que la infraestructura hoy por hoy no está respondiendo al tiempo reinante. Hoy la obra más urgente es el cambio de cubierta de techos, el cual comprende también la revisión de todo el sistema eléctrico. La ampliación, que era parte del proyecto general, quedará para otro momento. La prioridad es la seguridad que corresponde a quienes vienen a dar y tomar clases, por eso empezaremos por el cambio de tejas por un techo de chapa. Se va a sacar la teja, se hará el recambio del entablonado que no esté en condiciones y se pondrá perfilería de chapa. Hace una semana vino un arquitecto y se vio qué tipo de perfiles emplear, para que se condiga con el recambio de techo y no sea sólo una reparación ‘en parches’ como se dice, de manera que está encaminado”.

Troncoso anunció que dentro de las próximas 24 horas comunicará a la directora el resultado de la inspección eléctrica, informe que resulta esencial para las autoridades del Consejo General de Educación a la hora de definir si el espacio físico es apto para el dictado de clases.

“La solución más inmediata son las tres aulas que está construyendo cooperadora. La idea es terminar las tres aulas que está haciendo Arquitectura y así tener seis aulas disponibles como para después seguir con la cubierta de techo, que forma parte del proyecto general”, dijo Troncoso, al tiempo que agregó: “A pedido de los padres, asumí un desafío que es en 60 días volver, para evaluar las respuestas brindadas. Me lo pidieron como para ganarle a la burocracia y yo creo que es un compromiso lógico. No vine sólo a poner la cara, sino a dar una respuesta con el respaldo del ministro Benedetto y la prioridad solicitada por el gobernador Bordet”, concluyó.

Dentro y fuera del aula, el mismo diluvio