Panaderos de Crespo se reunieron recientemente para evaluar la relación costo-ganancia en la actividad, acordando en consecuencia un aumento del 10% en el kilo de pan/galleta. Dicha suba al momento de entrega del producto fraccionado en los puntos de venta -como despensas y supermercados- llevaría a que los consumidores lo adquieran en góndola por un valor de entre $40 a $42.

Quienes se dedican al rubro panaderil aseguraron a FM Estación Plus 94.3, que "ya no se pueden soportar" los costos de las tarifas, cuyas facturaciones se elevaron de sobremanera en el último período. La gran mayoría presenta el mismo sistema de elaboración, que es mediante hornos eléctricos con combustión a gas. Asimismo, sostienen que se incrementa el precio de la bolsa de harina ante cada reposición de insumo, costos que inevitablemente deben ser trasladados al precio.

Las mayores dificultades la presentan aquellos que llevan el pan ya fraccionado a los puntos de venta, dado que también deben considerar el gasto de combustible que insume el reparto.

Los nuevos precios ya impactan en los consumidores y los elaboradores esperan que no se recientan las ventas, aunque no pocos son los vecinos que han vuelto a la compra por mostrador y a granel, donde se consigue el kilo a unos pesos menos.